El adios a mi abuela Tomacina (Mama Yiya)

Adios Mama Yiya Después de la muerte de Mamá Yiya (mi abuela paterna) el pasado mes de enero, he tratado en varias ocasiones de escribir algo sobre mis abuelas y hacer algo lindo para ellas, algo que toda mi familia pueda leer. No les voy a negar que he comenzado a escribir, sin éxito volver al inicio una y otra vez, y sin aun terminar, borro todo. Pero hoy he sacado el valor para escribir y aunque tenga que hacerlo con lagrimas en los ojo, voy a decirles lo que siento.

El día que recibí esa llamada de mi hermana en que me dijo “Karina, abuela murió hoy”, sentí un nudo en mi garganta tan profundo que solo pude llorar y recordar casi automáticamente los momentos en que pude tenerla cerca y disfrutar de su compañía.

Para mi las abuelas son las personas mas importantes e influyentes en nuestras vidas, y aunque no la tengamos siempre cerca, ellas definitivamente dejan su huella en nosotros. Mi abuela sobrevivió a todas las adversidades que la vida le presentó, fue tolerante hasta donde ya los limites no alcanzaban, paciente, cariñosa, respetuosa, humilde, sacrificada, y siempre decía: “Para llegar lejos en el matrimonio hay que tener mucha paciencia, pero mas que nada, mucho amor” !!! Que palabras tan sabias tenía mi abuelita. Yo no la disfrute tanto como deseaba, siempre soñaba con ser una nieta consentida, tal como recuerdo a mi abuela materna Modesta (Tata), Era tan solo una niña cuando Dios se la llevo, mi corazón ha estado roto desde ese entonces y solo quedaba en mi mente el recuerdo de mi madre, llorando en los brazos de mi padre sentados en la cama, mientras yo desesperada lloraba sin entender porque Dios me robaba mi abuelita.

Quizás cuando ella murió yo no lo entendía porque era una niña, pero ahora que Dios decide llevarse mi otra abuela, tengo una mayor conciencia de los hechos, sin embargo, no me ha pasado desapercibido estos sentimientos encontrados que raspan mi corazón y entristecen profundamente mi alma.

Tomacina Santana (Yiya) y Generoso Vialet (Mis abuelos paternos)

Entiendo que el Todo Poderoso tiene un plan maestro y no nos avisa cuando nos necesita. Por eso debemos estar siempre preparados para decirle a Dios: “Estoy listo, llévame contigo”. No necesitaremos despedirnos porque viviendo bajo las leyes del Rey Creador cada día será una despedida hermosa, será como el ultimo día, y no tendremos la necesidad de pedir PERDON y decir TE QUIERO antes de partir. Mama Yiya fue una mujer como ya no existen, tubo 17 hijos y hoy la familia es inmensamente grande, con hijos, nietos, biznietos, tataranietos y solo Dios sabe cuantos mas, muchos separados por las distancias (geográficamente) pero todos unidos por el recuerdo. Y es exactamente el recuerdo lo que nos mantendrá su imagen viva en nuestros pensamientos y en nuestro CORAZON. Descansa en paz Abuelita !!

Laura Vialet

(Karina)