El primer dia de trabajo (2da. parte)

El primer día de trabajo (2da parte) En nuestra primera parte de este articulo, hablamos de una serie de consejos que nos ayudarían a triunfar en nuestra primer etapa como nuevo empleado.

A continuación, vamos a hablar de algo que es más importante que haber conseguido el empleo, es lo que les garantizará mantenerlo, nos referimos a conocer a su JEFE!!!

Observando a su Jefe estudiará qué tipo de persona es, conocerá con más exactitud qué espera de usted en cada momento.

Los jefes básicamente esperan dos tipos de respuestas en el rendimiento de sus empleados, a veces se lo pedirán directamente y otras dejaran que usted lo entienda indirectamente. Estas son: a) Que usted, aporte constantemente sus ideas y estrategias propias para el buen funcionamiento de la organización. b) Que usted haga sólo y únicamente lo que se le ordene.

Tiene que observar su jefe desde el primer día en que usted entra a trabajar en la organización, y reconocer cada una de sus manías y costumbres en la empresa, lo que le gusta y aquello que detesta. Haciendo este ejercicio, usted se dará cuenta de que: -Su jefe odia que le interrumpan cuando esta al teléfono. -Los lunes en la mañana su jefe no atiende ninguna llamada y se marcha muy tarde de la oficina. -Los jueves por la tarde tiene su acostumbrado partido de Golf. -Los viernes siempre esta de buen humor y trabaja hasta media tarde, y usa ropa informal. -No recibe visitas si no tiene previa cita. -Odia el café sin crema. -No perdona dos errores iguales…

Y así una enorme lista que le ayudaran a saber cuando su jefe esta de buen o mal humor, y cual es el mejor momento para exponer sus puntos de vista sobre eso que llevan tiempo buscándole solución en la empresa, y que usted ya la tiene.

En todo momento debe conocer sus limitaciones, como nuevo debe saber que hay ciertas cosas que no llegaran como regalos, hay que ganárselo todo, y esto lo conseguirá con sus esfuerzos y su gran capacidad, que fue sin lugar a duda la principal razón por la cual esta dentro. Por lo tanto:

-No empiece a pedir desde el primer día. Piense que antes de poder exigir nada, tendrá que demostrar que si le han dado el puesto es por su valía. Pedir una segunda línea de teléfono la primera jornada puede sonar ostentoso, pero si usted hace ver que es productivo y sabe esperar, cuando la solicite puede que hasta le den contestador y fax junto a la línea.

-Tenga iniciativa y criterio propio. Comente lo bueno que se le ocurra, pregunte lo que no sepa o entienda, interésese por cuanto tenga que ver con su labor o incluso la empresa en conjunto. Este es el momento para aprenderlo todo respecto a sus nuevas funciones. Ahora se lo permitirán, puede que más adelante no. Aunque resulten molestos con preguntas constantes, este tipo de trabajador es en última instancia lo que quiere la empresa. Pero tampoco hay que excederse. Haga una lista de preguntas para comentarlas todas de una vez y cuide las ideas brillantes para no parecer un listillo o un elemento que amenace la armonía.

-Potencie además cualidades que a buen seguro tiene (por algo le han seleccionado), pero que ha de demostrar que no son sólo una pose de la entrevista. Competencia, hacer ver las capacidades y habilidades, no hacer falsa modestia, tener seguridad, hacer preguntas con fundamento, ser flexible, responsable, tener iniciativa, implicarse en el trabajo, cooperar, trabajar en equipo, ser leal, solidario, mantener la calma ante los conflictos... -Y, por último, no se desespere si descubre que su trabajo es aburrido o monótono, que sus compañeros parecen más bien una secta, o que su jefe no tiene la palabra gracias o por favor en su vocabulario.

La peor de las situaciones aún puede reportarle beneficios que ni sospecha. Busque el lado bueno de las cosas. Un trabajo aburrido puede dejarle tiempo libre para otras actividades, un jefe maleducado puede ser, por otro lado, permisivo en cuanto al horario. Aproveche cuanto pueda, ganará en experiencia y en currículo. Y si la situación le resulta insostenible, siempre puede buscar otro trabajo.

Qué Espera su Jefe de Usted

Muchas personas en sus primeros días en el su nuevo puesto se obsesionan por resultar rentables desde el primer momento. Están más preocupadas por empezar a archivar o entender el programa de ordenador con el que van a trabajar que cualquier otra cosa. Esto es un error. En primer lugar, los directivos y jefes son conscientes de la ignorancia en muchos aspectos del recién llegado, por lo que tienden a resultar más tolerantes e indulgentes con los primeros fallos que muchas veces la propia persona en sí. Por razones más que obvias, no esperan que todo lo haga bien, sobre todo los primeros días.

Por encima de eso, les preocupa más el proceso de adaptación de la persona a dicha organización. Y ahí está la productividad de estos primeros días: entrar en contacto con los nuevos compañeros, conocer al guía o mentor que les va a asesorar o aconsejar, descubrir la organización interna de la empresa, familiarizarse con el nuevo espacio... Dedicarse a este tipo de cuestiones los primeros días es mucho más rentable a la larga. Esto los directivos lo saben. Por ello, lo más seguro es que sólo esperen que se muestre amable, simpático e interesado.

El empleado nuevo debe ser como una esponja y tratar de absorber todo lo bueno que tiene alrededor, pero como las esponjas lo absorben TODO, es su tarea y responsabilidad saber que toma y que deja, al final solo usted sabe lo que mas le conviene.

Buena suerte

LV